El 13 de marzo de 2023 falleció la adolesente de 14 años Norma Lizbeth Ramos Pérez. Norma había sido víctima de bullying en la Escuela Secundaria Oficial 0518 del Estado de México, y tras varias oleadas de violencia verbal, su agresora la citó el 21 de febrero a las afueras de la escuela para una pelea a la que Norma acudió con la finalidad de que las agresiones cesaran.

En esta pelea Norma recibió varios golpes en la cabeza con una piedra, lo que le generó un traumatismo craneoencefálico que le provocó la muerte. A raíz de esto, el video de la pelea ha sido difundido en redes sociales, sin respetar la dignidad de la adolescente, revictimizándola cada vez que se difunde en los medios de comunicación y redes sociales. Este hecho propicia y fortalece el esquema de violencia en el que murió Norma. 

En México 3 de cada 10 mujeres han sufrido violencia escolar a lo largo de su vida. Norma acudió ante la directora de la escuela a pedir ayuda por el reto a la pelea que le había lanzado su compañera de escuela, sin embargo no hubo respuesta por parte de las autoridades escolares. 

Desde Impunidad Cero consideramos que la violencia escolar es la suma de un conjunto de omisiones por parte de autoridades y núcleos familiares completos, por lo tanto debe entenderse como una responsabilidad compartida y combatirla de esta forma. Además, insistimos en que la justicia para niños, niñas y adolescentes siempre debe ser con un enfoque de reinserción, en donde se ponga a la persona menor de edad al centro, pues  la comisión de un delito por parte de un adolescente es consecuencia de un entorno incapaz de contener el acto y de frenar la violencia desde su origen. 

Este preocupante y doloroso hecho debe abrir la discusión pública para que las autoridades a nivel federal y estatal  generen y refuercen los programas integrales para contrarrestar el acoso que viven alumnas y alumnos dentro de las escuelas. Además, hacemos un llamado a que los medios de comunicación y la sociedad  tomen en cuenta que la difusión de ciertos contenidos, como el video de la agresión a Norma y la estigmatización que se ha hecho a la madre de la compañera de escuela, refuerzan estereotipos machistas y revictimizantes que atentan contra los derechos humanos de  ambas partes. Exhortamos a las instituciones de educación a no ser cómplices del silencio cuando se presenta un caso de bullying entre estudiantes de cualquier nivel educativo, para así prevenir una tragedia, como el caso de Norma.